Residencia San Francisco de Asís -Capuchinos León
Residencia San Francisco de Asís -Capuchinos León
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Convento San Francisco de Asís -Capuchinos en León
Parque dedicado a San Francisco de Asís -Capuchinos León
Residencia de Estudiantes de León -Capuchinos 1
Residencia de Estudiantes de León -Capuchinos 3
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Historia de la Iglesia de San Francisco de Asís

1.- La antigua y nueva iglesia.

La antigua iglesia de San Francisco era de dos naves, y tenía numerosos enterramientos de la más distinguida aristocracia de León, muchas capillas adyacentes y otros monumentos históricos, que al ser demolida, desaparecieron. Hubo también en ella algunas reliquias insignes colocadas en el altar mayor, y entre ellas –dice el Padre Castro- las de los santos mártires San Blas y San Tirso, en cuyos días era numeroso el concurso a venerarlas (Árbol cronológico, P.I. pág. 177).

Hubo establecidas en la iglesia numerosas Cofradías o Congregaciones; entre ellas las de San Sebastián; de la Purísima Concepción; de la Santa Cruz; la de San Tirso; y la de San Buenaventura, fundada ésta “con acuerdo de los padres Discretos y consentimiento del Convento por los Hermanos del trabajo para animarles a la virtud y esforzar a los pequeños y humildes al servicio de Dios y bien de las almas”.

Las causas que motivaron la demolición de la antigua iglesia y la construcción de la nueva nos son desconocidas. Respecto al nuevo y espacioso templo, comenzado a construir en 1763, existen noticias interesantes en un manuscrito de aquella época, que se conserva en la B.S.F. del cual entresacamos lo siguiente: “Aunque en el archivo de este convento no se conserva memoria ni noticia del día en que se ha empezado la magnífica iglesia que acaba de construirse y consagrarse, no obstante, un curioso de la ciudad conserva en sus apuntaciones, que en 22 de abril de 1763 se dio principio a la excavación de los cimientos de la iglesia nueva de este Convento, a las seis de la mañana, y que entre cinco y seis de la tarde del día 22 de mayo de dicho año, se puso la primera piedra, con asistencia del Ilmo. Sr. D. Pascual de los Herreros. Era Guardián el Padre Fray Francisco de Gordaliza”. En los veintiocho años que se tardó en la construcción de la iglesia, no se halla noticia de especial mención.


“El día 1 de mayo de 1791, consagró el Ilmo. Sr. D. Cayetano Cuadrillero y Mota, Obispo dignísimo de León y uno de los prelados más afectos que conoce nuestra Religión en los reinos de España, la magnífica y asombrosa iglesia de este Convento, que acaba de construirse y edificarse a expensas de la devoción, caridad y limosnas de los fieles de esta ciudad y de los alrededores... Está decorada la referida iglesia, con el orden dórico, bajo diseños y con dirección del profesor de Arquitectura D. Francisco Rivas (Terciario), quien ha dado pruebas inequívocas del singular afecto que profesa al sayal de San Francisco, dirigiendo con sus luces la conclusión de la fábrica.

El 2 de mayo, celebró la Comunidad la fiesta solemne de la Dedicación, con asistencia de su Señoría Ilustrísima y un concurso muy numerosos de fieles; predicó el Padre Lector de Prima, Fray Matías Carniago; dijo la misa el Reverendo Padre Guardián, Fray Francisco Luelmo... No es fácil ponderar el gozo con que asistieron a estas funciones los leoneses y forasteros, con especialidad los devotos de Nuestro Padre San Francisco...

El día 28 de julio del año 1793, se concluyó la excelente obra del órgano por el maestro D. Manuel Baquero, habiéndola comenzado el 25 de abril del año anterior, siendo Guardián de todo este tiempo el Reverendo Padre Matías Carniago...

El día 4 del mes de julio de 1796, entre ocho y nueve de la mañana, se prendió un fuego voraz en este Convento, el cual redujo a cenizas todo el dormitorio que mira al oriente y el que está al mediodía. Se reedificó en poco tiempo... El altar mayor se colocó a últimos de julio de 1819, y el 3 de octubre las imágenes de San Francisco y Santo Domingo; Era Guardián el Reverendo Padre Fray Anselmo Mellado”.

2.- El periodo de la desamortización.

El 11 de septiembre de 1835 se decretaba por el ministerio de Mendizábal, la supresión de las Órdenes religiosas. En consecuencia, los Religiosos debieron abandonar el Convento, que quedó por algún tiempo inhabitado y expuesto a la destrucción de los elementos; y posteriormente fue ocupado por familias enteras y convertido en edificio público. No corrieron mejor suerte los objetos sagrados destinados al culto divino.

El altar mayor de la iglesia fue trasladado a la villa de Boñar, donde se conserva aún; otros altares laterales se distribuyeron entre otras iglesias, algunas de la ciudad (probablemente Renueva, San Martín y otras); alguna de las campanas se asegura que fue a dicha iglesia de San Martín; y desde luego, como es sabido, la preciosísima imagen de la dolorosa que allí se venera –obra del celebérrimo artista Carmona-, como el San Francisco del Museo provincial, y el nazareno que se saca en procesión el Domingo de Ramos, pertenecían a este Convento de San Francisco.

El pavimento de losa que tenía la iglesia, es el mismo que hoy se ve en los soportales de la Plaza Mayor de la Ciudad. Los demás objetos de culto desaparecieron, sin que tengamos la menor noticia de su paradero.


El edificio fue vendido por partes en diversas ocasiones. Y el templo, dividido en dos partes, portal (todo el bajo coro) y la iglesia propiamente dicha, fue convertido en taller y fragua, donde se restauraban carruajes.

Esta triste historia del Convento e Iglesia de San Francisco de León iba a tener pronto un final feliz gracias a la Venerable Orden Tercera de San Francisco, que con el empuje de D. Joaquín Ruiz, D. Antonio Calvo, D. Rogelio Cañas, y después de superar no pocos obstáculos e incomprensiones, se presentaron al Sr. Obispo –D. Saturnino Fernández de Castro- y le manifestaron su intención de adquirir el Convento e Iglesia de San Francisco.

Con sus propias aportaciones y las de otros muchos hermanos de la Orden Tercera, incluidas las aportaciones de otras fraternidades de la península: Lugo, Plasencia, Orihuela, Cuenca, Santander, Sevilla, Huelva y Murcia; el 4 de marzo de 1880 la Orden Tercera compra la Iglesia y el Convento de San Francisco por 33.000 pesetas.


3.- Llegada de los Capuchinos y restauración del templo.

La Divina Providencia, que dispone las cosas suave, pero eficazmente, quiso que por los días en que los Hermanos Terciarios colectaban con mayor actividad para la restauración del templo de San Francisco, fueran conocidos en León los Hermanos Capuchinos gracias a una “novena – misión” a la que fueron invitados por el Sr. Obispo de León, D. Saturnino Sánchez de Castro. La “novena-misión” tuvo lugar en dos iglesias a la vez: Nuestra Señora del Mercado y Santa Marina. Tal fue el éxito de esta “novena-misión” que al finalizar la misma ya hubo conversaciones para que los Capuchinos pudieran venir a León. Famosa es la expresión del Sr. Obispo de León que, recogiendo el sentir del pueblo leonés exclamó: “Pues queréis Capuchinos, Capuchinos tendréis”.

Los fervores provocados por la “novena-misión” de los Capuchinos y el trabajo incansable de la Orden Tercera Franciscana, hizo que las obras de restauración del templo se empezaran el 10 de abril de 1880, bajo la acertada dirección y administración de D. Rogelio Cañas. A fin de dar un nuevo impulso a las obras y recoger nuevas limosnas, el 24 de diciembre de 1881, llegaron a León los Padres Francisco de Carcar y Lorenzo de Molina, pasaron algunos días albergados en Palacio, hasta que pudieron habilitar, para residencia y habitación, la parte vieja adosada al ábside de la iglesia. El 30 de marzo de 1882 el señor Obispo anuncia a sus diocesanos el acuerdo al que ha llegado con los Capuchinos para que, en breve, se establezcan en el Convento e iglesia de San Francisco.

Se entarimó la iglesia, se blanquearon las paredes, se colocaron los cuatro Evangelistas en las pechinas de la cúpula, se prepararon los altares para el culto, el coro se puso en condiciones para cantar el oficio divino, y, sobre todo, se puso el altar mayor con el retablo que se trajo de la Catedral, juntamente con los del Corazón de Jesús y Beato Diego, laterales del crucero que son parte del altar mayor. Los demás altares laterales, unos se trasladaron de la capilla de la Venerable Orden Tercera, otros son de la Catedral, y alguno donativos de familias cristianas. El 12 de mayo de 1882, llegaba a la ciudad en calidad de Presidente, el Rev. Padre José de Valdeviejas, con cuya presencia las obras recibieron nuevo impulso.


El 8 de diciembre de 1882, se inaugura el espacioso y magnífico templo. En una crónica de la época se recoge: “cuantas personas han visitado la restaurada y magnífica iglesia de San Francisco, no han podido menos de alabar el gusto artístico con que se han llevado a cabo todas las obras, así en la colocación de los altares como en el decorado de las naves y demás”.En el año 1895, día de Pentecostés, se inauguró el camarín de la Divina Pastora, obra de D. Félix Ferrer, de Barcelona. La imagen de la Divina Pastora, de mérito artístico indiscutible, es obra del Venerable Hermano Fray Antonio de Vera, Capuchino.

La catequesis se estableció en nuestra iglesia el 21 de abril de 1900, con aprobación del Sr. Obispo. Estaba debidamente organizada en secciones que enseñaban algunos Coristas, designados por el Hno. Guardián. Igualmente, en este periodo, se estableció la Congregación de los Luises, que unos veinte años más tarde, al establecerse los Jesuitas en León, pasó a ellos, poniéndose bajo su dirección..

Entre los años 1907 y 1910 tiene lugar el nacimiento de la Congregación de la Divina Pastora gracias al trabajo incansable del P. León de Santibáñez. Agrupó a las sirvientas en asociación, que se llamó de la Divina Pastora y San José, les dedicó uno de los domingos del mes para sus funciones religiosas, les asistió con puntualidad y fundó para ellas una caja de ahorros de mucha utilidad.

Entre los años 19919 y 1922 se instala la luz eléctrica en la iglesia, iluminándose todas las arañas de la misma y varios altares. Todas las Cofradías y Congregaciones que hay en la iglesia han contribuido a cubrir los gastos.

En el periodo que va del 17 de febrero de 1964 al 2 de febrero de 1965 se hicieron notables mejoras en la iglesia, que fue consagrada el 2 de febrero de 1966.

La última gran reforma de la Iglesia de San Francisco ha sido llevada a cabo entre julio de 1996 y abril de 1997. Y ha consistido en: renovar la ubicación de teja, limas y tragaluces; actuación sobre obras de fábrica en cámara de cubierta; reconstrucción de muro transversal en la crujía norte; acondicionamiento interior de la crujía lateral; actuación sobre obras de fábrica en el exterior; limpieza y reconstrucción de las vidrieras; celosías de madera en cámaras de cubierta; y pintura del interior del templo.

 

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